“Congreso Nacional de Honduras en Parálisis: 50 Días sin Sesiones y una Crisis de Consenso en la Elección de Fiscales”

Hoy se cumplen 50 días desde que el Congreso Nacional de Honduras ha estado paralizado, según informes emitidos por diversas instancias de la sociedad civil. Durante este año, el Congreso ha sesionado solo alrededor de 42 días, desde enero hasta octubre, lo que ha desencadenado una creciente preocupación por su productividad legislativa.

Hasta la fecha, se han presentado aproximadamente 367 proyectos de ley, pero sorprendentemente solo se han aprobado 71 de ellos. Este bajo índice de aprobación se ha convertido en un motivo de alarma para la sociedad civil, especialmente después de que el año pasado se presentaran más de 900 proyectos de ley.

La parálisis legislativa se ha agravado debido a la incapacidad de las fuerzas políticas para llegar a un consenso en la elección del fiscal general y el fiscal general adjunto del Ministerio Público hondureño. Para que un candidato sea elegido, necesita obtener al menos 86 votos en el Congreso, y ninguna de las dos propuestas ha logrado alcanzar este número.

El diputado Carlos Zelaya, jefe de la bancada del partido Libertad y Refundación, anunció en los medios de comunicación que las sesiones no se reanudarán hasta que exista un consenso para elegir a los fiscales. Esto ha dejado al Congreso en un punto muerto, ya que las dos principales propuestas presentadas hasta ahora no han logrado el apoyo necesario.

Por un lado, la propuesta del partido Salvador de Honduras, que propone al abogado Marcio Cabañas como fiscal general y a la abogada Jenny Almendares como fiscal adjunto, solo ha obtenido 74 votos en varios intentos de elección. Mientras tanto, la propuesta del partido Libertad y Refundación, que propone a Joel Zelaya como fiscal general y a Marcio Cabañas como fiscal adjunto, ha alcanzado solo 52 votos.

Además de la crisis política, se ha revelado que se han destinado más de L 682.4 millones en gasto, del cual más de 50 por ciento se ve reflejado en el pago de salarios para diputados y diputadas en lo que va del año. Esta cifra es motivo de controversia, ya que contrasta con el escaso número de días de sesiones en el Congreso. La población y diversas organizaciones están exigiendo correcciones urgentes en el sistema para garantizar una gestión más eficiente y representativa en el Congreso Nacional de Honduras.

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