Nota: Héctor Maradiaga

Fotografías: tomadas de la Web

El 2022 arranca con una nueva administración gubernamental, y a su vez, con aires de crisis política, que proyecta inestabilidad en Honduras de cara a los próximos 4 años.

Se ha consumado la juramentación de dos Juntas Directivas en el Poder Legislativo, una dirigida por Jorge Cálix, acompañada por el Partido Nacional, Liberal y la disidencia de Libre, y otra, presidida por Luis Redondo, la cual, cuenta con el respaldo y reconocimiento de la presidenta electa, Xiomara Castro, quien asume las credenciales del país, este 27 de enero.

Analistas como Raúl Pineda y Efraín Díaz, advierten inestabilidad, que puede ser peligrosa para la gestión del nuevo gobierno. Díaz, manifestó a medios de comunicación que, es necesario retomar el diálogo, resolver diferencias y tomar decisiones pensando en los intereses del país.

Por su parte Pineda, afirmó que, a partir del 27 de enero, cuando Castro tome posesión, el país entrará en una nueva coyuntura, y que el Congreso que preside Redondo, será el reconocido por el Ejecutivo.

“Cuando un Gobierno tiene el dinero y el control policial, tiene el poder real”, argumentó Pineda, quien se atrevió a pronosticar que, la Junta Directiva de Cálix, será débil y no tendrá el poder, porque no será reconocida por el Ejecutivo.

En esa línea se expresó el diputado de Libre, Jari Dixon, quien recalcó que el Congreso de Redondo, será el reconocido por el Ejecutivo, y afirmó que nada de lo que decidan los diputados comandados por Cálix, tendrá la sanción de Xiomara Castro.

En las juramentaciones, tanto Redondo como Cálix, anunciaron decisiones de la mano de la ciudadanía y del gabinete de Zelaya, por ejemplo, Cálix, recalcó que derogará las Zonas Especiales de Desarrollo y la Ley de Secretos, y Redondo, prometió desmontar la estructura gubernamental que dejó el Partido Nacional.

Ambos enfatizaron en que su nombramiento es legal y amparado en la Constitución de la República, ante eso, el abogado Raúl Pineda, explicó que no solo se trata de ver la legalidad, sino en quien tendrá el poder real.

Dixon dio a conocer que quien entregará la banda presidencial a Xiomara Castro, será Luis Redondo, mientras que abogados como Fernando González, comentaron que se debe tener cuidado con el proceso de entrega y juramentación presidencial, pues la Constitución manda que, ante situaciones de este tipo, se acuda a otros mecanismos legales, como el nombramiento oficial, por parte de la Corte Suprema de Justicia.