La Policía Nacional desarticuló este sábado por la noche una fiesta ilegal en una residencia de estudiantes Collegiate Marina Real del distrito marítimo de Valencia. Los agentes sorprendieron a treinta jóvenes sin mascarillas en una habitación individual con altavoces, luces de discoteca y bebidas alcohólicas.

Según han explicado fuentes del cuerpo armado a ABC, una patrulla se personó en el lugar, alrededor de las doce y veinte de la noche, tras recibir la llamada de alerta de unos vecinos, molestos por el elevado volumen de la música.

 

Tras inspeccionar todas las plantas del centro, los efectivos desplazados vieron a un joven con un bote de cerveza en la mano en la puerta de una habitación que inmediatamente gritó «Policía, Policía» para advertir a sus compañeros, al tiempo que intentaba huir de los agentes.

El chico fue interceptado y todos los participantes en esta fiesta ilegal fueron identificados tras pedirles que abandonaran el cuarto y se pusieran la mascarilla.

En total se levantaron 61 actas de sanción: treinta por no llevar este elemento de protección contra el coronavirus, otras treinta por no respetar las restricciones para las reuniones sociales y una más por desobediencia y resistencia a la autoridad. Todos ellos se enfrentan a multas de entre 601 y 30.000 euros.

Fuente: ABC